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Cuando era pequeño había un culto generalizado por la religión. Actualmente el culto está centrado en la tecnología. Por cincuenta años he visto como el dios de nuestra sociedad era el dinero. Ahora existe una obsesión por los dispositivos electrónicos. El nuevo Dios es la Inteligencia Artificial, cuyos algoritmos son la dictadura digital que anula la humanidad de los ciudadanos convertidos en terminales de la estructura del sistema que organiza las cosas del mundo en la Tierra. La nueva religión es el transhumanismo – Aldo (fundador del acimut comunal).

 

 

1.- El viaje continúa

2.- Tendencias humanas

3.- Actitud Vital

4.- Conducta vital

5.- Proyecto vital

6.- Cómo puedo

7.- Como quiero

8.- Como debo

9.- Cómo vibrar

10.- Cómo fluir

11.- Ocupación vital

12.- Dignidad vital

13.- Plenitud vital

14.- Libertad vital

15.- Cinco punto cero

16.- Expresión natural

17.- Devenir natural

18.- Acción natural

19.- Condición natural

20.- Artificial o natural

21.- Dinámica práctica

22.- Mundo sano

23.- Hacia el futuro

COMUNICADO del fundador del ACIMUT COMUNAL

Quien defiende su libre albedrío, a su vez está defendiendo el libre albedrío de todos los demás. Proteger el íntimo palpitar es una misión colectiva.

La soberanía individual mantiene como principio la energía vital que vibra sin ser limitada o restringida por ninguna influencia externa.

Su único cometido es divulgar el latido de la existencia humana en la Tierra, con la suficiente autonomía y toda su autenticidad, para dejar impresa la huella inequívoca del ser humano. De él o de ella en particular, con su peculiaridad y su completa singularidad, en cada rasgo y acción, de día o de noche, en verano o invierno.

El acimut comunal se abstiene de decirle a nadie qué hacer, decir o pensar. Simplemente nos abrimos, compartiendo la sensibilidad y el sentir que nos caracteriza para que otros sepan que es posible desplegarse al viento con intensidad ¡para ser inmensos!

En modo alguno se interfiere en la libre elección independiente de otro. La elección voluntaria debe partir de la esencia genuina de cada uno, sin embargo, en los tiempos modernos que nos ha tocado vivir, sobre todo a las nuevas generaciones, les está resultando casi imposible escapar de la ficción jurídica y la mentira sistemática que engaña.. sin que muchos sean conscientes.

Valoramos los tesoros internos de nuestra especie, eso hacemos en las comunidades naranja: estimulamos los atributos únicos de cada miembro que dispone de su natural inquietud (hoy obstruida) y de su iniciativa innata (tan manipulada en nuestra época). Destinados a ser un referente mundial, proclamamos la necesidad de regresar a la potencia del amor que deviene fraternidad. La fraternidad que tan arraigada estaba en los tiempos del campo y lo rural, en etapas antiguas cuando las metrópolis no existían y el problema de uno era el problema de todos.

Al final, la verdad se reduce a lo siguiente: ningún ser humano dispone de mayores privilegios que otro. Nadie debería supeditar su sentir y convicción interna a otra persona o institución o dispositivo electrónico. Nadie debería poder ser sometido bajo la fuerza de otro ser humano. Si se da el caso, si sucede el atropello, es simplemente porque esa fuerza que se erige como autoridad, ha olvidado la ley natural y los principios humanistas.

Todo individuo es genuino y dispone de dones naturales. Libertad es un concepto del mundo moderno, que desde el progreso y los avances de la tecnología, ha secuestrado el latido de los ciudadanos convertidos en usuarios del sistema y el ciberespacio. Sin embargo, los algoritmos y las ondas electromagnéticas nunca son tan imprescindibles como nos aseguran. La gestión que viene manipulada, consigue coaccionar la administración propia de los recursos del ser humano.. individuo capaz de actuar sin presión.

Hombres y mujeres somos responsables de nuestros actos, ¿sí?

Ninguna autoridad debe otorgar privilegio o eximir a nadie de ciertas obligaciones, entonces, ¿por qué se regulan los derechos y los deberes de la población? ¿Será que los individuos han perdido la capacidad del juicio propio? ¿Será que con cada década se los hipnotiza y envenena más y más? ¿Dónde queda el sentido común?

Se muestra “el sentido común” en el seno familiar y los colegios y la cultura que promocionan los medios… ¿Sí?

Nacemos como seres humanos y, de inmediato somos absorbidos por la aspiradora del sistema artificial que ha creado un mundo virtual plagado de fraudes y falsedades.

Con pesar lo afirmo: urge la necesidad de recuperar “lo natural” por consiguiente, quede claro mi legítima defensa de la propia integridad física y espiritual. Basta de extorsiones que implantan comportamientos ajenos al sentir de mi voluntad. La dictadura digital es una afronta a la humanidad de los ciudadanos, se trata de un agravio que favorece al totalitarismo global.

Hay que retomar el sentido común y comprender que cada Ser Humano es idéntico ante la opción para establecer su estilo de vida. La manera de ser y estar en el mundo que armoniza con su palpitar, siempre y cuando se cumpla la única ley: nunca jamás, bajo ningún concepto, herir lastimar o dañar intencionadamente, perjudicando a otro ser humano.

Tiene que ser posible el desarrollo humano para la expansión de la innovación social, transmitiendo los tesoros internos que configuran el trayecto existencial que dejará la huella y el legado.

Es vital disponer de experiencias directas que cada uno deberá filtrar desde el particular criterio que lo caracteriza. Preservemos nuestra identidad, la esencia genuina que somos en nuestra intimidad. Tracemos cada uno el propio rumbo, y, dotemos de un destino asombroso y precioso para nuestra especie.

 

ALEXANDRO ENERGYS - Webmaster